[youtube]http://www.youtube.com/watch?v=47mzsGFbcqA[/youtube]

Junio 2011

El Observatorio de Radio y Televisión analizó el programa de televisión que conduce Ariel Rodríguez Palacios, “La Cocina del 9”, transmitido por Canal 9(1)

 

Según se pudo comprobar mediante la observación de las distintas emisiones de los programas, Rodriguez Palacios emite enunciados discriminatorios de forma constante haciendo chistes y comentarios burlescos homofóbicos, transfóbicos, xenófobos, racistas y sexistas. En general el objeto de sus chistes es su ayudante, el “Chino” mientras que el locutor, “Gabo”, tiene un rol más participativo. Por último, hay un cuarto personaje que no está presente y al que se hace referencia constantemente, el “Topu Gigo” (algo así como un amigo imaginario) y cuyo nombre, por si hace falta aclararlo, es un juego de palabras con “puto”.

En primer lugar, señalaremos los chistes xenófobos y racistas. Rodriguez Palacios utiliza frases racistas y ridiculiza constantemente al colectivo asiático, imitando de forma burlona los idiomas de las colectividades asiáticas con una voz nasal. Citamos algunos ejemplos:

“Está caliente como negro en baile”
[youtube]http://www.youtube.com/watch?v=UmmjHyBD-GI[/youtube]

“Jamanamá jamamamá kama sutra”, “ñañañañañjajjaja”.
[youtube]http://www.youtube.com/watch?v=hYJVY0v3ltY&feature=related[/youtube]

“Jajajnananañanñañaña”
[youtube]http://www.youtube.com/watch?v=hF4UPdLtSkc&NR=1[/youtube]

Este último chiste puede observarse en casi cualquier programa ya que se repite una y otra vez con ciertas variaciones. También suele hablar con oraciones gramaticalmente incorrectas y con verbos en infinitivo y reemplazando las letras” R” por las letras “L” como lo haría un migrante del continente asiático. En ocasiones la producción suma un gong:

“Chino alcanzar cucharón”.
“Chino me lo cuida. jama nananamaman kama sutra”
[youtube]http://www.youtube.com/watch?v=47mzsGFbcqA[/youtube]

“… El color velde… el molón lojo”
[youtube]http://www.youtube.com/watch?v=1RjY–m_xA4[/youtube]

“Jalalala clara de huevo para después hacer merengue… un recipiente…  no tiral clara de huevo”
[youtube]http://www.youtube.com/watch?v=t4vb7_d8I4g&NR=1[/youtube]

“…Cuchillo glande… hijo de puta, dalme (se corrige) usted dalme cuchillo glande…”

“La abuela del Chino allá en Chinalandia, el Chino nació en Chinatown….”

En segundo lugar, los chistes homofóbicos y transfóbicos también son muy habituales:

“¿Otra vez proctólogo? ahora ya le gusta, es vicio”, le dice a su ayudante de cocina, el “Chino”.

“Cuando fui al baño me sentí incómodo con Gabriel que me miraba…”.
(3 de septiembre de 2010)

Rodríguez Palacios (RP): “Usted se está pintando los ojos y los labios”
Gabo (G): “No proyecte en mí todos sus deseos”
RP: “A mí me ponen una base porque brillo, mucho brillo”
Suena una canción de Locomía que en el imaginario social refiere a la diversidad sexual.
[youtube]http://www.youtube.com/watch?v=1RjY–m_xA4[/youtube]

Su ayudante (el “Chino”) toma un pimentero grande, lo cual sirve de disparador para los chistes de doble sentido:
“…Como le gusta agalar el capochone… delicadamente el chino agarra el capochone…”
[youtube]http://www.youtube.com/watch?v=1RjY–m_xA4[/youtube]

“…Al chino se le cayó algo, ya entiendo porque es amado por tantos hombres…”
[youtube]http://www.youtube.com/watch?v=1RjY–m_xA4[/youtube]

RP: “¡Cómo agarra la arveja eh!”.
G: “Con la boca”.
RP: “Sí, con la boca, con los dientes… está excitado hoy, anoche estuvo con el topu y lo excitó (risas) Manopla Gabo le dicen…”.
[youtube]http://www.youtube.com/watch?v=1RjY–m_xA4[/youtube]

El locutor lee los mensajes:
G: “Saludos de Sebastián que es un gran consumidor de huevos y está muy atento…”.
RP: “¿Y Sebastián es su ex pareja?”.
G: (con voz gruesa) “¡No! ¡por favor!”.
RP: “Ah, no es su ex pareja, es otro”.
G: “No no no”.
RP: “No, como empezó a decir lo de los huevos…”.
G: “No, todas mi ex parejas son mujeres”.

G: “Me salió medio topu, no?”.
RP: “Le salió como es usted, le salió su personalidad”.

“Gabo es un tipo amplio, en todo sentido…”.
(2 de septiembre de 2010)

En tercer lugar, Rodriguez Palacios apela a un humor sexista:

RP: “El aceite del atún en lata tiene que ser bueno, sino es como chupar una foca, alguna vez chupó una foca?”.
G: “Y en un momento de desesperación…”.
RP: “Queda mucho sabor a pescado… bueno, lo vi besando bastantes focas este fin de semana”.
G: “Morsa, morsa”.
[youtube]http://www.youtube.com/watch?v=9EFZTTkMP_w&NR=1[/youtube]

“La masa hay que relajarla, no se excite, relajada…” (jadeando e imitando la tonalidad y el acento de una película pornográfica española).

RP: “Vamos a tener unos bollitos (de masa) de 90 gramos, y otros de 60… 90, 60”.
G: “Las medidas ideales, 90, 60, 90…”.

“Vamos a estirar la masa, Gabo trajo su palito (…) está finito ahora, era más….”.
[youtube]http://www.youtube.com/watch?v=FtGa935eR7U&NR=1[/youtube]

 

Análisis:

En los comentarios analizados, más allá de su evidente carácter discriminatorio, no está de más señalar, por darse en todos los casos en un contexto humorístico o cómico, que un acto discriminatorio no se define por su intencionalidad. Es decir, la persona puede no tener como finalidad discriminar y sin embargo hacerlo. Por lo tanto, la discriminación debe medirse por las condiciones y el resultado de las acciones.

Tomamos la definición del instructivo del Área Queer(2), según el cual “La discriminación es un conjunto de prácticas culturales de estigmatización y represión en función de las cuales se vulnera la igualdad de oportunidades, trato y resultados de distintos colectivos y sujetos/as sociales en función de la desigualdad y las diferencias que se atribuyen a los mismos”.

Los chistes y las burlas son una forma de discriminación habitual cuando su “efecto” o “gracia” descansa en la identificación de las características de un grupo o colectivo social. La risa puede herir la dignidad de los grupos a pesar de que su formulación como broma se perciba como algo poco grave y “aceptable” por el contexto en el que se enuncia(3). Al basarse en principios aparentemente “naturales”, la risa y la comicidad no sólo niegan la condición ideológica de los prejuicios sino que refuerzan la diferencia y reproducen las relaciones de desigualdad. El humor puede reproducir y legitimar las relaciones de subordinación y poder que se establecen en una sociedad. Los chistes, las burlas y los insultos pueden tener efectos muy claros al habilitar acciones y convocar a la violencia.

Podemos agregar, para los casos analizados, que una forma “camuflada” de discurso discriminatorio son los estereotipos. El estereotipo es la asociación de determinadas personas a ciertas características, conductas, etc. Esta asociación simplifica y deforma la realidad, todas estas creencias son prejuicios. Estas formas de discriminación son tan graves como las abiertas e intencionales porque crean sentimientos de inferioridad y superioridad entre las personas y sustentan desigualdades reales(4).

Como señala el instructivo del Área Queer, los estereotipos en los medios de comunicación, sean éstos escritos o audiovisuales, en la publicidad o el entretenimiento actúan como códigos que proveen pautas de comprensión sobre sujetos o grupos. Transforman los prejuicios sobre algunos grupos en “acuerdos sobre la realidad”(5). Son usados para justificar y legitimar relaciones de poder y modos de autoridad. Además, los estereotipos perpetúan la desigualdad y la exclusión como problemas individuales que requieren permanente vigilancia y control.

– Xenofobia y racismo

En primer lugar, debemos señalar lo ofensivo de las burlas y los chistes de Rodriguez Palacios hacia las colectividades asiáticas. En nuestro país, estos colectivos suelen ser homogeneizados perdiendo así la diversidad de culturas y las especificidades de cada colectivo particular. Así, la denominación “coreano” puede reemplazarse por “chino” o simplemente se recurre al genérico “orientales”. Las distintas identidades quedan subsumidas en una sola, perdiendo de esta manera las riquezas de cada una.

El colectivo afrodescendiente,  por su parte, sufre una invisibilización histórica en nuestro país; el mito de que “en la Argentina no hay negros” circula aún con fuerza como parte del sentido común. El concepto de “negro” se asocia históricamente a la pobreza, lo “marginal” y lo “peligroso”. Y aparece en otros enunciados discriminatorios como “trabaja como un negro”, “cabecita negra” o “es cosa de negros”, y también la frase utilizada por Rodriguez Palacios, “caliente como negra en baile”. A ello debemos sumarle los insultos, la persecución y la burlas a los que son sometidos distintos colectivos en nuestro país a través del mote de “negros”. No sólo los afrodescendientes sino también pueblos indígenas, migrantes y personas en situación de pobreza.

– Homofobia y transfobia

El Plan Nacional contra la Discriminación(6) explica que nuestra sociedad historicamente legitimó una concepción de sexualidad “única”, “normal”, “sana” y “legal” que se contraponía a cualquier otra concepción de sexualidad. Esta noción niega la evidencia de la existencia de sexualidades diversas y diferentes expresiones e identidades de género.

Las personas con identidades de género, orientación o prácticas sexuales no normativas figuran entre los colectivos discriminados en nuestra sociedad, a los cuales se les reservan etiquetas negativas y epítetos peyorativos y ofensivos. Este sentimiento de rechazo y desprecio, que en ocasiones llega a la violencia física y la agresión contra estas personas, se denominan “homofobia” y “transfobia”.

Las posiciones homofóbicas, transfóblicas y misóginas evidencian posiciones y actitudes intolerantes que tienen como objetivo controlar las vidas de las personas y limitar su autonomía a través de procedimientos particularmente agresivos y poco respetuosos de la pluralidad.

Cómo puede verse claramente en “La Cocina del 9”, hay una fuerte impronta homofóbica y transfóbica, reiterándose chanzas y caricaturas sobre gays y travestis . Cómo si esto fuera poco, se utilizan además, términos y construcciones gramaticales abiertamente discriminatorias (puto, “topu”, etc.)

– Sexismo

Cómo señalamos más arriba, el humor de Rodriguez Palacios es sexista. Esto es por lo menos sorprendente si tenemos en cuenta que el programa, por el horario en que se emite (a la mañana) y su temática (cocina) apuntaría a un público tradicionalmente femenino, al cual sin embargo, invisibiliza y excluye. Los chistes son “masculinos”, de doble sentido, las referencias a lo fálico y al aspecto ideal de las mujeres son constantes. El lenguaje del programa es machista, despectivo y cosficador hacia las mujeres.

Por todo lo expuesto, señalamos nuestra preocupación en torno a la “La Cocina del 9”  y recomendamos evitar producir y reproducir miradas y actitudes discriminatorias. Por último, señalamos nuestra sorpresa ante la cantidad de chistes políticamente incorrectos en la televisión que han caído en desuso.

Recomendaciones:

Las siguientes recomendaciones se realizan en concordancia con lo expuesto por el citado Instructivo del Área Queer(7) de la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad de Buenos Aires:
1) Evitar las expresiones xenófobas.
2) Cuestionar los estereotipos que el sentido común establece en relación con la desigualdad y las diferencias haciendo visible que las imágenes binarias construidas a partir de rasgos asignados como características constantes, atemporales y ahistóricas, se basan en procesos ideológicos. Estas tipologías son las que habilitan la burla y el desprecio hacia prácticas que no responden a los parámetros de “normalidad” (hombre blanco, heterosexual, de clase media).
– En el caso particular del colectivo afrodescendiente, se recomienda evitar los estereotipos que remiten al exotismo, a la potencia sexual, a lo “salvaje” y al rendimiento físico para el deporte ya que implica la fijación de una «característica racial” naturalizada.
– En el caso particular del colectivo asiático, sugerimos respetar las diversidades culturales y no englobar a las distintas nacionalidades bajo un genérico como “orientales”.
3) Sugerimos evitar caracterizaciones y “perfiles” que impliquen una naturalización del prejuicio, la burla y/o el insulto, o la exposición de los conflictos por géneros u orientaciones y prácticas sexuales no normativas como nota de color o pintoresquismo.
4) Tratar como prácticas discriminatorias los gestos, epítetos o comentarios burlescos o injuriosos producidos por miembros de la industria del espectáculo, el deporte o por celebridades públicas que suelen justificar sus enunciados excluyentes al considerarlos dentro de sus “contextos particulares”.

Notas:


1- Los programas fueron visualizados en la pàgina web www.youtube.com y en dvds aportados por la AFSCA.

2- Área Queer, Medios de Comunicación y Discriminación, Desigualdad de Clase y Diferencias de Identidades y Expresiones de Géneros y Orientaciones Sexuales en los Medios de Comunicación, Facultad de Filosofía y Letras, Universidad de Buenos Aires, 2007.

3- Batiuk, Verona, Derechos y Justicia: para vos, para mí y para tod@s, coordinado por Malena Derdoy y Soledad Pujo, 1ª ed. Buenos Aires, Fundación CIPPEC, 2006.

4- Batiuk, ídem.

5- Área Queer, op. cit.

7- INADI, Hacia un Plan Nacional contra la Discriminación. La discriminación en Argentina. Diagnóstico y propuestas (2005), Buenos Aires, Ministerio de Justicia, Seguridad y Derechos Humanos, Instituto Nacional contra la Discriminación.

8- Área Queer, op. cit.