[youtube]http://www.youtube.com/watch?v=QWDIrlB10Qg[/youtube]
Octubre 2011
El Observatorio analizó el spot de Renault Sandero “Quíntuple de riesgo” que se transmite por televisión.
Descripción
Un hombre joven se presenta: «Soy ‘doble de riesgo’, hago lo que los actores no se atreven a hacer». Acto seguido corre hacia un ventanal y lo atraviesa con su cuerpo pulverizando el vidrio.
Otro hombre joven con su espalda en llamas dice: «Soy ‘triple de riesgo’, hago lo que los dobles de riesgo no se animan a hacer». Después de lo cual enviste y pulveriza también el cristal de la ventana con su cuerpo.
Un tercer hombre con la espalda en llamas y una antorcha en la mano dice: «Yo soy ‘cuádruple de riesgo’. Hago lo que los triples de riesgo no se atreven a hacer». Corre hacia la ventana y cuando está a punto de atravesarla, una especie de cinta metálica se despliega sobre el vidrio. El hombre en llamas lo atraviesa igual y ya en la calle inicia una pelea derribando a dos hombres.
Aparece un cuarto hombre conduciendo un automóvil Renault Sandero que va junto a una mujer. Este hombre es un poco más pequeño y más rubio que los precedentes y dice: «Yo soy ‘quíntuple de riesgo’. Hago lo que nadie se anima a hacer». Seguidamente estaciona su auto y es interpelado por un hombre joven alto y morocho con un “trapito” en la mano que parece vigilar el estacionamiento callejero.
– Eh amigo, son 30 pesos para estacionar acá.
– Si es gratis… –dice el dueño del vehículo alejándose-.
– ¡Eh!
Las miradas de ambos se fijan, amenazantes, como en un duelo sin palabras que replica la música de fondo al remitir a situaciones de duelo entre cowboys de las películas norteamericanas. Inmediatamente el muchacho que controla el estacionamiento de autos en la vía pública responde:
– Está bien, no.
El propietario del vehículo se va satisfecho, junto a la mujer que lo acompaña. Una voz en off agrega: “Nuevo Renault Sandero. Un auto con personalidad, para gente con personalidad”.
Análisis
A partir de la descripción del spot, se observa que el mensaje está centrado en que sería más peligroso enfrentarse a una persona que cuida autos en la calle que tener un trabajo riesgoso como ser doble (o quíntuple) de riesgo. En consecuencia, la publicidad analizada construye un estigma alrededor de una actividad, asociando atributos como la peligrosidad a las personas que ejercen la tarea de cuidar autos en la vía pública, más conocidos/as como “trapitos”. En forma inmediata, esta clase de construcciones contribuye al pánico con respecto a la inseguridad reforzando los prejuicios hacia estos grupos.
El spot reproduce el estereotipo y la imagen discriminadora del pobre- marginal-peligroso(1). Se culpabiliza a la persona excluida del sistema laboral formal y se lo trata como una amenaza al “orden público”.
El Plan Nacional contra la Discriminación (PNcD) establece que son prácticas sociales discriminatorias crear y/o colaborar en la difusión de estereotipos de cualquier grupo humano por características reales o imaginarias, sean éstas del tipo que fueren, sean éstas positivas o negativas, y se vinculen a características innatas o adquiridas. Es necesario agregar que las prácticas sociales discriminatorias no se explican por ninguna característica que posea la víctima de dichas prácticas, sino por las características del grupo social, sociedad o Estado que lleva a cabo el proceso discriminatorio.
Los estereotipos cumplen una función comunicacional de importancia central ya que son el resultado de una selección que, por fuerza de la costumbre y de las representaciones dominantes de la cultura, termina instalándose como la forma natural de pensar, como la única posibilidad de percibir el rol que determinado sujeto o grupo social debe ocupar en una sociedad histórica. Así, si bien el mensaje comunicacional –especialmente el publicitario- muchas veces recurre al uso de estereotipos para hacer de la comunicación un proceso eficaz, no podemos dejar de considerar que la carga valorativa de los mensajes evoca imaginarios sociales que configuran modelos, formas y tipos de vínculos entre los miembros de la sociedad(2).
En conclusión, el Observatorio de la Discriminación en Radio y Televisión sostiene que esta publicidad colabora con la naturalización de un estigma respecto a determinados sectores como victimarios de la falta de seguridad.
Por último, este Observatorio desea recordar que ya observó anteriores publicidades de la empresa Renault como el spot “Hacete hombre” en el que se reproducen estereotipos de género y como “Fotógrafo” cuyo mensaje podría atentar contra la sensibilidad de las personas que militan por los derechos humanos y en contra de las desapariciones de mujeres por las redes de trata.
Notas
(1) INADI, Hacia un Plan Nacional contra la Discriminación. La discriminación en Argentina. Diagnóstico y propuestas (2005), Buenos Aires, Ministerio de Justicia, Seguridad y Derechos Humanos, Instituto Nacional contra la Discriminación, p. 189.
(2) Informe sobre el tratamiento televisivo de las repercusiones de las medidas agropecuarias.